Trabajo ha levantado 220 actas por emplear a inmigrantes irregulares
JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife
La crisis económica, que sacude con fuerza los mercados bursátiles, las empresas y las economías domésticas, también está provocando un aumento de la picaresca, con los inmigrantes como damnificados. De hecho, en los tres últimos años han proliferado los empresarios que, aun a riesgo de ser sancionados, están contratando a extranjeros sin permiso de trabajo, mano de obra barata que a menudo ocupa puestos a los ni siquiera quieren acceder los nacionales. Como no podía ser de otro modo, Canarias es una excepción. Según datos de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social en la provincia de Tenerife, desde 2009 se han levantado 220 actas de infracción por contrataciones de inmigrantes sin papeles, que supusieron más de 1,5 millones de euros en multas.